Siringomas, en plural, porque estos bultitos suelen salir agrupados en los párpados, sobre todo en el inferior, en la zona de las ojeras. Una zona de gran repercusión estética. Lo que le faltaba a ese párpado inferior ya de por sí propenso a oscurecimientos e hinchazones.
La palabra siringoma se compone de la terminación ”oma”, que hace referencia a algo que crece por encima de lo normal y «siringio», que es el conducto de drenaje de las glándulas sudoríparas («syrinx» en griego significa tubo).
Parece que el problema surge por la proliferación de la parte más superficial (intraepidérmica) de este tubo, el acrosiringio, el poro de salida del sudor, para entendernos.
No obstante, hay autores que dudan: ¿el origen de los siringomas es ecrino o apocrino, de la glándula sudorípara o de la glándula sebácea?

Siringomas agrupados en forma de placa.
Aunque hay variantes, los siringomas aparecen la mayor parte de las veces rodeando los ojos, con aspecto de bultitos de color similar o ligeramente modificado respecto a la piel normal (algo más pálido a veces, también amarillento o rosado).
Es raro que alcancen más de 3 mm de diámetro, aunque si se agrupan tienen aspecto de placa con pequeños resaltes. Tienden a salir bilateralmente.
Son más frecuentes en mujeres, algunos autores han encontrado en las lesiones receptores para hormonas femeninas, y tienden a debutar en la juventud.
La malignización es excepcional.
No causan molestia local, a veces prurito en los eruptivos, pero sí gran disconfort estético.
Variantes de siringomas
- Localizados: Los más habituales.
- Generalizados (eruptivos y múltiples): En los eruptivos, más frecuentes alrededor de la pubertad, aparecen como numerosas lesiones en pocas semanas y algunos autores los relacionan con procesos inflamatorios previos en la zona (eczemas, tratamientos con láser…) Pueden verse afectadas palmas de manos y plantas de los pies. (Link)
- Familiares
- Asociados a Síndrome de Down y otras enfermedades: Síndrome de Ehlers-Danlos, Síndrome de Marfan.
La mayoría de las veces el diagnóstico es a simple vista, pero en casos clínicos especiales puede plantearse la confusión con los siguientes procesos:
- Hiperplasia sebácea
- Urticaria pigmentosa
- Xantomas eruptivos
- Liquen plano
- Quistes de millium
- Acné
- Sarcoidosis
Siringomas al microscopio
Debajo de una epidermis normal y a nivel de la dermis superficial, se observan cordones celulares y conductos formados por dos capas de células cúbicas, en mitad de un estroma fibroso; la imagen es característica, con aspecto de coma o renacuajo. El interior de los ductos suele contener un material amorfo, eosinófilo.

Siringomas, imágen típica en coma o renacuajo. Foto: euthman
El siringoma de células claras es una variante donde aparecen focálmente agrupaciones de células de citoplasma grande y claro conteniendo glucógeno (PAS +).
En algunos casos se han observado mastocitos y células névicas acompañantes.
Parece que de forma reactiva, se ven proliferaciones siringomatosas en biopsias de cuero cabelludo con alopecias cicatriciales y en prúrigos nodulares.
Estudios inmunohistoquímicos:
-
Positivo a EKH-6, queratinas (1,5,10,11,19 a veces 14) y CEA (diferencia con el tricoepitelioma desmoplásico).
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Negativo para EKH-5 y SKH-1.
Siringoma condroide: Es una entidad distinta. Suele ser único, puede alcanzar el tamaño de varios centímetros y en alguna ocasión puede malignizar. (Link)
Tratamiento de los siringomas
Son motivo de consulta, habitualmente por la alteración estética que producen. Digamos que se lleva muy mal su presencia en el área de interrelación por excelencia, añadiendo distorsión a la mirada.
Hay que tener experiencia en su manejo, pues cualquier sobretratamiento, empeoraría la situación.
Se consiguen buenos resultados con láser de Co2 ultrapulsado.
Otras opciones:
- Electrocoagulación con bisturí de radiofrecuencia
- Dermoabrasión superficial
- Cirugía: Aprovechando la resección de piel sobrante en una corrección de párpados (blefaroplastia).
- Láser de Co2 y toxina botulínica tópica: Esta combinación queda reflejada en un reciente artículo .(Link)
Eduardo Lauzurica. Dermatólogo